Plataformas IoT: qué son y cuál es la mejor para su negocio

Qué es una plataforma IoT

Al referirnos a una Platoforma sería algo así como un montón de piezas de Lego, cada una con una forma y color diferente, que podemos ensamblar según necesitemos para crear cualquier modelo (virtual).

El principio que subyace a la noción de plataforma es el habitual "no reinventar la rueda" y, en su lugar, confiar en la experiencia de otros que ya han construido sistemas similares al que vamos a crear. Este enfoque acelera el tiempo de implementación, evita los típicos errores y, lo que es más importante, permite al usuario/la empresa centrarse en lo que mejor sabe hacer: su lógica empresarial.

Las plataformas están de moda en muchos ámbitos, pero en particular, en el mundo del IoT. Según Gartner, estas capas de abstracción, que protegen a los desarrolladores de la complejidad del sistema subyacente, fomentan la adopción generalizada de IoT y Edge Computing, especialmente a medida que las funcionalidades se vuelven más sofisticadas. Estas plataformas, por lo tanto, llenan el vacío que la falta de estándares para el despliegue y la orquestación de aplicaciones IoT ha creado. Pero, ¿qué piezas necesitamos para nuestro sistema? O, digámoslo así, ¿cuáles son los componentes típicos de una plataforma IoT?

Componentes de una plataforma IoT

El alcance del IoT es muy amplio, abarcando entornos tan diversos como los wearables, las ciudades inteligentes o la Industria 4.0. En este artículo nos centraremos en las aplicaciones industriales, donde se encuentra nuestra experiencia, aunque muchos de los elementos que se presentan a continuación también son extensibles a otros entornos, como los hogares o las ciudades inteligentes.

CONECTIVIDAD IOT

Cualquier aplicación de IoT podría resumirse como la conexión de los activos en el campo con los activos en la nube. Los dispositivos sobre el terreno -los nodos IoT- se encargan generalmente de recoger los datos necesarios y los activos en la nube se encargan de almacenarlos y facilitar su análisis. La conectividad de IoT es la columna vertebral de cualquier aplicación de IoT. Recientemente hemos visto cómo la toma de decisiones se está acercando al borde, hacia Nodos IoT o nodos Edge. Pero a pesar de esto, el cordón umbilical que conecta el borde con los sistemas centrales, sigue siendo primordial para que la aplicación funcione correctamente.

CONECTORES PARA PROTOCOLOS DE COMUNICACIÓN

En el nivel jerárquico más bajo de la aplicación tenemos los dispositivos IoT, nodos IoT o nodos Edge, como queramos llamarlos. Estos dispositivos suelen estar conectados a otros dispositivos sobre el terreno, como sensores, actuadores o equipos industriales. Estos equipos industriales proceden de diferentes proveedores, cada uno con su propio hardware y firmware, y hablan protocolos muy diferentes, que pueden ir desde estándares industriales muy extendidos, como Modbus, hasta protocolos más específicos o incluso propietarios. El papel de los conectores para que los nodos entiendan estos protocolos es también clave a la hora de recoger los datos de los equipos.

GESTIÓN Y SUPERVISIÓN DE NODOS

A medida que los despliegues de IoT crecen en número y también se dispersan geográficamente, se hace evidente la necesidad de un sistema de gestión centralizado. Esta gestión suele estar a cargo de un módulo de gestión de flotas, que proporciona información básica del estado de los dispositivos desplegados y permite realizar actualizaciones de software de forma remota.

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INTERFAZ DE DESARROLLO DE APLICACIONES

Los datos recogidos (a través de los conectores de protocolo mencionados anteriormente) y enviados a la Nube (utilizando la conectividad IoT) se realiza generalmente por una aplicación desplegada en los dispositivos. En Computación de borde esta aplicación también se realizará un procesamiento más complejo dentro de los nodos, es decir, contendrá parte de la lógica de negocio. En cualquier caso, muchas plataformas ya incluyen un entorno integrado para el desarrollo y la depuración de aplicaciones. Además, incorporan funcionalidades de bajo código, lo que permite a los usuarios implementar sus sistemas utilizando sencillas interfaces gráficas y arrastrando y soltando elementos, conectándolos entre sí o simplemente seleccionando las opciones de los menús desplegables.

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DESPLIEGUE Y ORQUESTACIÓN DE APLICACIONES

Las aplicaciones que se ejecutan en los dispositivos deben desplegarse de forma remota y segura. Todas las plataformas de IoT incluyen un módulo de orquestación de aplicaciones dirigido a enviarlas a los dispositivos, actualizarlas, obtener información sobre su estado, etc.

INGESTIÓN Y ALMACENAMIENTO DE DATOS

En los últimos años hemos visto un cambio hacia más análisis y toma de decisiones del lado del dispositivo, también conocido como -Edge Computing-, pero a pesar de esto, las bases de datos siguen siendo un elemento central en cualquier aplicación. Podemos tener bases de datos centralizadas en la nube (con sus redundancias) o bases de datos parciales en cada dispositivo que, idealmente, se sincronizan con las bases de datos centrales.

PROCESAMIENTO Y VISUALIZACIÓN

Los datos en bruto tienen una utilidad limitada y no es hasta que los analizamos en detalle cuando podemos extraer valor de ellos. La mayoría de las plataformas incluyen herramientas de procesamiento y visualización o facilitan la integración con herramientas de terceros. El análisis de datos abarca desde el simple crujido de datos hasta los modelos de inteligencia artificial más complejos.

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ANÁLISIS Y ENVÍO DE COMANDOS A LOS DISPOSITIVOS

Una vez procesados los datos, aplicando nuestra propia lógica de negocio para tomar decisiones, necesitamos que esas decisiones se conviertan en acciones. En otras palabras, es necesario que se pasen al flujo descendente, de modo que los dispositivos participen activamente en el funcionamiento del negocio. Esto no siempre es deseable, pero a veces es interesante que los nodos IoT actúen sobre su entorno, en cuyo caso las plataformas incluyen un módulo que permite enviar estas órdenes a los dispositivos.

CIBERSEGURIDAD

Cualquier plataforma de IoT debe ser robusta desde el punto de vista operativo, pero, sobre todo, debe serlo en términos de ciberseguridad. Especialmente en el mundo industrial. De hecho, la seguridad es una de las barreras más importantes para la adopción de tecnologías TI por parte de empresas establecidas con una fuerte herencia de OT. Estas características de seguridad incluyen: como el cifrado de datos, la cancelación de puertos, la limitación de servicios de red, la aplicación de autenticación, etc.

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¿Qué plataforma es la mejor opción para mi negocio?

Hay muchos tipos de plataformas y el desglose anterior sólo pretende presentar algunos de los servicios que pueden ofrecer estas plataformas. A la hora de seleccionar una plataforma de IoT, es útil distinguir entre plataformas genéricas y productos más específicos.

Las plataformas genéricas son las de proveedores como Azure, AWS o Google, que ofrecen un amplio ecosistema de herramientas. Las opciones de estas plataformas son prácticamente infinitas, pero suelen tener una curva de aprendizaje considerable y no están adaptadas a las necesidades específicas de determinados segmentos de clientes.

En el otro lado del espectro, podemos encontrar plataformas más específicas, como la Industrial Edge Platform de Barbara, con capacidades más limitadas, pero adaptadas a verticales específicos, en nuestro caso a sectores como el eléctrico, la gestión del agua y el ferroviario. Estas plataformas suelen ofrecer un mejor soporte al usuario y unos tiempos de desarrollo y despliegue mucho más cortos.

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