"Al ser humano hay que devolverle los valores que con el taylorismo puro y duro de las tareas repetitivas era la antítesis de lo que es la Industria Moderna". Diego Galar
En esta tercera y última entrega de la entrevista con Diego Galar, experto en Mantenimiento, profesor de Condition Monitoring en la Luleå Tekniska University de Suecia, e investigador senior en Tecnalia, hablamos del impacto de la Industria 5.0 o Industria Cognitiva en la que pasaremos del mantenimiento prescriptivo al mantenimiento cognitivo puro y duro.
Si no ha leído las entrevistas anteriores, le animamos a hacerlo en los siguientes enlaces sobre: la evolución del mantenimiento industrial y los modelos de negocio de mantenimiento en la era digital.
Ahora estamos ante el deseo de la "fábrica oscura", donde no hay luz porque no hay operarios. No necesitamos operarios para producir, esto está demostrado, podemos sustituir al humano en la producción al 100% pero no estaba nada claro que el humano pudiera ser sustituido en las tareas de mantenimiento hasta ahora.
Ahora tenemos equipos y robots que se mantienen solos. Las máquinas ahora pueden tener condiciones de reinicio, de autorreparación, pueden utilizar otras máquinas para repararse a sí mismas e incluso actualizar sus características.
Y en ese sentido la comunicación M2M entre máquinas es una de las cosas que más está avanzando. Las máquinas ahora pueden compartir eventos, compartir conocimientos, compartir modelos, todas estas tecnologías están avanzando muy rápido y no es un operario el que va a decir "este modelo que tengo aquí en el robot es bueno y lo voy a copiar en todos los robots".
Si el robot dice que el modelo es bueno, lo publicará entre todos sus compañeros, lo que significa que no hará falta nada, y en este sentido no es necesario ir muy atrás en el tiempo.
No es algo nuevo, lo vemos en los parques eólicos y solares. Tenemos robots que hacen el mantenimiento de los equipos submarinos y en las plantas de extracción de petróleo tenemos robots que limpian y sueldan las tuberías automáticamente. Si tenemos robots que limpian y engrasan, ¿por qué no robots un poco más avanzados?
En este sentido, al nivel de los robots tradicionales y los nanorobots, veremos máquinas resistentes, porque las máquinas no sólo tienen que ser robustas sino también resistentes. No tiene sentido que una máquina que tiene un problema se detenga o se apague y se bloquee, esa máquina tiene que ser capaz de reiniciarse y volver a funcionar sin necesidad de que intervenga el operador.
En este sentido, hemos ganado mucho en robustez, también estamos ganando mucho en resiliencia y el concepto de fábrica oscura va a ser un concepto que, con la Industria 5.0, ya estamos dando el salto de la prescripción a la cognición pura y dura.
Nos encontraremos con máquinas inteligentes en el sentido de que serán autoconscientes, que entienden el contexto en el que trabajan y actúan automáticamente según el contexto y que además son resilientes, de manera que no necesitan la intervención humana para rearmarse en caso de eventos desafortunados. Desde luego, veo la Industria 5.0 en ese sentido, unida a la llegada de la 5G y la computación cuántica.
Diego Galar
Para ciertos activos veo esta realidad en 5 años y para la industria en 10 años.
Si observamos los niveles de autonomía de los vehículos sin conductor en la actualidad, podemos decir que es una realidad relativamente cercana. Tenemos metros, coches, trenes de alta velocidad sin conductor e incluso aviones.
Empresas como Scania, por ejemplo, ya trabajan con camiones que se comunican entre sí, comparten datos con los talleres y pueden sustituir determinadas piezas de recambio sin que intervenga el conductor.
Y en la industria, creo que pasarán 10 años antes de que tengamos este tipo de activos inteligentes, es decir, cuando la cadena de montaje se configure sola y sea resistente y robusta.
Si te interesa este tema, ya puedes acceder al webinar en "Tecnologías disruptivas en el mantenimiento de infraestructuras críticas".